En el proyecto se consigue disponer de un sistema de iluminación muy cuidado en cualquier espacio, alineándolo a los ritmos circadianos para disminuir todo lo posible la sensación de fatiga de los trabajadores.
Se promueve el movimiento dentro del edificio ya que el mismo recorrido se puede efectuar por diferentes circuitos con una correcta señalización y proyecto de wayfinding al detalle para mejorar la orientación de los usuarios.
La nueva imagen apuesta por la continuidad cromática y de materiales del proyecto arquitectónico, empleando madera de fresno que aporta calidez, combinada con tonos blancos que aportan claridad y luminosidad. Los colores corporativos de la Generalitat también se encuentran en los espacios pertinentes, acompañados con acabados sobrios, neutros y de colores acordes.
Además de cumplir al 100% el programa requerido, se buscó crear espacios diferenciales como las zonas ovales icónicas en los espacios comunes. También se diseñó de mobiliario hecho a medida para generar espacios colaborativos y de reuniones más informales, espacios vagón y espacios de encuentro. Todo esto, en una distribución muy abierta y modulada.
En todo el proyecto se promueve la biofilia incorporando vegetación a la parte superior de los módulos de almacenaje. Desde cualquier punto de la planta tienes conexión con el exterior o con algún elemento natural.
Además, se garantiza un excelente confort acústico mediante un pavimento textil “anti fatiga” que absorbe el sonido de impacto y reduce la reverberación.